martes, 5 de abril de 2011

Irreverencia y rebeldía para ganar la calle

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Irreverencia y Rebeldía para ganar la calle
 
Frente a la coyuntura política estudiantil, protagonizada en lo reciente por sectores estudiantiles de derecha creemos oportuno presentar una postura pública con la finalidad de desenmascarar las intenciones reales de estos sectores.

La expresión fascista y altamente reaccionaria de la derecha venezolana ha lanzado una nueva arremetida a través de su movimiento estudiantil burgués, utilizando una careta de lucha reivindicativa para ocultar de forma vil y astuta sus intereses contrarrevolucionarios y desestabilizadores. Desarrollaron una supuesta “huelga de hambre” con argumentos superficiales, manipuladores, cínicos y pretendiendo incidir en la conciencia colectiva con una politiquería macabra y sensacionalista cosiéndose la boca.

La huelga de hambre ha sido una herramienta de protesta utilizada por hombres y mujeres que han denunciado el atropello de sus derechos, hombres y mujeres del pueblo históricamente explotado y oprimido. Además, durante las décadas de los ‘70, ‘80 y ‘90 éramos millones de personas de este pueblo los que pasábamos hambre, día a día, sin necesidad de una huelga como consecuencia del sistema capitalista y sus expresiones neoliberales, modelo económico que tanto defiende la derecha venezolana y su movimiento estudiantil “manos blancas”, los cuales se niegan por todos los medios a que este sistema desaparezca, ya que ese mismo modelo económico mundial es el que dicta los pasos del plan que desarrolla el movimiento estudiantil burgués en Venezuela.

El fin único de esta nueva arremetida no es resolver la crisis presupuestaria sino, por el contrario, detener por todos los medios posibles la avanzada popular hacia la transformación de la educación, herramienta fundamental para la liberación del pueblo y la transformación necesaria de la sociedad. Sus peticiones además de ser desestabilizadoras son hipócritamente reivindicativas, dejando de lado el problema estructural que azota a las universidades:

-       Mientras ellos quieren y exigen más dinero para las universidades, sin siquiera rendir honestamente cuenta de que han hecho con el dinero de los presupuestos anteriores de los cuales se ha comprobado que ha habido actos de corrupción y malversaciones mafiosas dentro de las universidades, dinero mal ejecutado, que desaparece y no resuelve el problema de nuestros comedores y bibliotecas, esto auspiciado por las ilustres autoridades universitarias y los nefastos pseudodirigentes estudiantiles de derecha. Por el contrario nosotros exigimos participación de todos los sectores de la comunidad universitaria (obreros, profesores, estudiantes, trabajadores administrativos y comunidades) en la regulación y manejo de ese presupuesto.
-       Mientras ellos manipulan el concepto de autonomía y se escudan en él para excluir a los sectores explotados y oprimidos de nuestro pueblo, nosotros entendemos la necesidad de la inclusión de la comunidad a la universidad y exigimos que la universidad deje de estar de espaldas a la sociedad.
-       Ellos dicen que luchan por las reivindicaciones de los trabajadores pero niegan la participación igualitaria de todos y todas en la toma de decisiones en la universidad, nosotros lo exigimos.

Por otro lado, consideramos necesario que todos los compañeros, hombres y mujeres que acompañamos el Proceso Bolivariano que lidera el compañero presidente Hugo Chávez, que luchamos constantemente por la materialización de la Revolución Socialista, no podemos vacilar ni dejarnos tutelar por sectores oportunistas y reformistas quienes desde algunos ministerios y como expresión de la burocracia estatal pretender conducirnos a un escenario signado claramente por una agenda electoral y conciliadora. Mientras tanto vemos, como parte de una política incorrecta, deficiente y conciliadora desarrollada por algunos sectores del gobierno bolivariano, que se le da a la derecha estudiantil beligerancia para actuar, se le oxigena mediáticamente dándole cobertura a sus manifestaciones, cayendo en la trampa del show mediático con supuestos debates a los cuales la derecha nunca va a participar, se sientan a discutir y se generan concesiones y aperturas constantemente ante este sector. La verdadera transformación de la educación debe ser expresión de la transformación de la sociedad, y no lograremos este objetivo solo ganando elecciones, ni mucho menos creando mas estructuras estatales (Ministerio para la Juventud y los Estudiantes) cuya consecuencia pudiera ser, si no se orienta de manera revolucionaria, burocratizar e institucionalizar exponencialmente nuestras luchas estudiantiles, desvirtuar los objetivos revolucionarios y mermar toda aquella iniciativa popular y de base que pretenda levantarse desde el movimiento estudiantil revolucionario.

En ese sentido estamos convencidos y convencidas que la política acertada para combatir a la derecha en estos espacios debe ser desarrollando planteamientos de avanzada, propuestas revolucionarias para transformar la educación y la universidad, una posición de ofensiva en contra del modelo capitalista y parasitario el cual sustenta a nuestras universidades tanto desde el punto de vista económico, político y académico. Además es necesario promover y desarrollar la organización revolucionaria y autónoma de los estudiantes y demás sectores universitarios como herramienta fundamental para consolidar el avance de la revolución y construir una alternativa revolucionaria estudiantil nacional que garantice el avance y profundización del proceso bolivariano a lo interno de las universidades.

Desde Bravo Sur hacemos un llamado a la batalla constante, no solo en el terreno de las ideas y el debate (terreno al cual la derecha le huye por falta de argumentos sólidos) sino también en el terreno de la movilización permanente, de la agitación política y de la organización revolucionaria. Es necesario desarrollar el debate político en las universidades, liceos, aldeas y politécnicos; centros de trabajo y comunidades. Hay que dar la batalla en la calle, es en éste terreno donde se logran las grandes victorias. Profundicemos el análisis político y su concreción en la práctica, incidamos en la correcta orientación de nuestro accionar como pueblo pobre organizado, incorporémonos y vinculémonos cada vez más a las luchas de los trabajadores y comunidades organizadas que son nuestras mismas luchas. Solo así, construyendo la unidad revolucionaria en el pueblo explotado y oprimido y de la vanguardia colectiva, con esta acumulación de fuerzas aseguraremos la victoria popular revolucionaria.

Es hora de que el movimiento revolucionario coherente, honesto y rebelde, se radicalice para así avanzar en el camino que nos llevará al socialismo y lograr así ser hombres y mujeres libres

¡Basta de Oportunismo y Burocratismo¡
¡Basta de Conciliación!.

Ni Vacilación, Ni Conciliación, Ofensiva Revolucionaria